La realidad virtual llega a la Fundació Bartolomé March Servera (Palma) de la mano del Museo Nacional Thyssen-Bornemisza y Endesa, empresa patrocinadora del proyecto. Entrar en el cuadro es una experiencia que permite al espectador, que pasa de ser sujeto pasivo a activo, pasear por prado francés de Auvers que dibujó Van Gogh. Se trata de un proyecto desarrollado por la empresa con sede en Zaragoza Entropy Studio, con la que ha colaborado el área Innovation Lab del Instituto Europeo de Diseño de Madrid. La entrada es gratuita, pero se tiene que reservar a través de la web del proyecto. Solo estará en Palma desde mañana y hasta el viernes, 26 de julio. Dos días. El horario es de 10 a 20 horas.

Los cubos de realidad virtual -en total hay cuatro- , según el director gerente del Thyssen-Bornemisza, Evelio Acevedo, han funcionado "extraordinariamente bien" en los tres lugares que han visitado hasta ahora -Madrid, Sevilla y Ferrol-. Uno de los objetivos de esta actividad es acompañar a los visitantes en su inmersión en la historia de la pintura a través de los cuadros más icónicos de la colección del Thyssen. Ya se ha mencionado a Van Gogh, pero también se reproduce un bodegón de flores holandés del siglo XVII y se visitan las calles y edificios de Nueva York, presentadas según la mirada -y la pintura- de Piet Mondrian. En este viaje tridimensional de cinco minutos también hay música, sonidos y viento.

"Es una oportunidad única para vivir algo diferente", ha comentado el director gerente esta mañana en la presentación de la experiencia. "Queremos que los públicos que no suelen ir a los museos se den cuenta de que un museo es una institución divertida, que sirve para aprender y para disfrutar. Y que el arte y la tecnología son una pareja muy potente".

Acompañaba a Acevedo en la presentación de Entrar en el cuadro el director general de Endesa en Balears, Martí Ribas, que subrayó la voluntad de la empresa de hacer accesible a la vez que acercar la cultura a la sociedad.