P ¿Para cuándo la aprobación del nuevo Plan General que sustituya al de 1998?
R Estamos trabajando en ello desde la anterior legislatura. Hemos contratado una asesoría externa que comenzará a trabajar a lo largo de este año. Se calcula que la tramitación durará entre dos años o dos y medio.
P ¿Estará listo en 2022?
R No me atrevo a poner una fecha, puesto que se trata de una cuestión compleja, que tiene una repercusión muy importante en la ciudad y que depende también de esta contratación externa que espero se pueda formalizar sin problemas, aunque el compromiso es que en esta legislatura se apruebe definitivamente.
P ¿Comenzarán de cero?
R No, porque en el pasado mandato ya se realizaron numerosos estudios e informes que se incorporarán a la documentación, además de marcarse los objetivos del Plan. El actual ha quedado caduco, no solo por los años, sino porque la realidad social actual es distinta y tenemos nuevos retos.
P ¿Qué objetivos se persiguen?
El nuevo plan debe afrontar la lucha contra el cambio climático para ser una ciudad más sostenible. Lo anterior tiene relación con los espacios verdes o cómo transversalizamos la ambientalización de la ciudad, y también con la nueva movilidad, que debe ser más sostenible con la implantación del tranvía o el trambús, incrementando el espacio para los peatones, nuevos ejes cívicos, mejorar el transporte público y la conectividad con otros sistemas de transporte, así como afrontar el reto de la vivienda. Un drama que viven muchas familias por la incapacidad de acceder a una vivienda a un precio asequible.
P Proponen la creación de superislas para recuperar espacios para los peatones.
R Se trata de un concepto desarrollado en el Eixample de Barcelona hace unos quince años, que consiste en unificar varias manzanas en cuyo interior solo se permite la movilidad sostenible, en algunos casos se prohíben los vehículos motorizados. En estos espacios comunes también se genera más vegetación que en las calles normales. Con ello se reduce la contaminación acústica y se incrementa la seguridad.
P ¿Puede poner un ejemplo?
R Queremos trasladar este concepto de superisla a Son Busquets, tal como se contempla en los acuerdos de gobierno. Esto implicará que el Plan Especial recoja esta propuesta, lo que supondrá que la movilidad interior debe ser sostenible. Debemos estudiar qué vehículos podrán circular, aunque no habrá el mismo tráfico que en las calles de alrededor.
P ¿Se debe parar la subasta de este antiguo acuartelamiento?
R Desde el Ayuntamiento queremos que Son Busquets siga siendo de titularidad pública, que pase a manos del Govern o de Cort y, para ello, la subasta no es la fórmula más adecuada. Además, tenemos dudas sobre la tasación de estos terrenos. Creemos que los 54 millones de salida es un precio muy elevado, e incluso inflado, tanto por la ubicación como por el tipo de solar ya que se debe urbanizar de nuevo.
P ¿Cree que la decisión del Gobierno de autorizar la subasta sin el PERI aprobado tiene que ver con el anuncio de introducir cambios en el planeamiento?
R Creo sinceramente que desgraciadamente el ministerio de Defensa desconoce completamente las dinámicas que se generan en la ciudad y, a la hora de tomar decisiones, Palma no existe. Sólo tienen en cuenta la relación de patrimonio abandonado en todo el Estado (Son Busquets está cerrado desde hace 20 años) y siempre han mostrado su interés en sacar una rentabilidad económica y especulativa a este patrimonio. Desgraciadamente el Ministerio funciona como una empresa privada con una cuenta de explotación y un patrimonio al que debe sacar el máximo provecho económico, aunque sea en contra de los intereses de la ciudad.
P Sin Son Busquets, ¿mantiene la previsión de promover 1.500 viviendas de protección oficial?
R Son Busquets está dentro de este cómputo tanto si la promoción es pública como si es privada, puesto que las 831 viviendas que se proyectan son todas ellas de protección oficial. Nosotros apostamos para que el terreno y las viviendas sean públicas, porque si no lo son, no podremos garantizar que sean de alquiler social y nosotros creemos que ahora disponer de estas viviendas son una mejor respuesta a las necesidades de la población.
P ¿Cuándo serán municipales los terrenos del Lluís Sitjar?
R No sabría decirle. Es una negociación larga en la que están involucrados muchos propietarios.
P El Consell
R Mantendremos la propuesta, aunque negociaremos con el Consell las alternativas de movilidad que garanticen las conexiones a la vía de cintura.
P ¿Qué medidas adoptará para garantizar el pago del alquiler?
R Nuestro compromiso es el de mantener las políticas activas iniciadas en el pasado mandato, como la oficina antidesahucios. También mantendremos las subvenciones a la rehabilitación de edificios en barrios vulnerables y al alquiler. Además, vamos a influir en el mercado inmobiliario, mediante la construcción de vivienda de protección oficial, por lo que estamos estudiando los solares susceptibles de ceder al Ibavi. Además, las nuevas promociones deberán destinar un porcentaje de viviendas asequibles y limitaremos el precio de los alquileres en distintas barriadas de la ciudad, en función de un estudio que vamos a encargar.
