Los vecinos de Son Espanyolet han constatado en su día a día "la incompatibilidad entre la actividad turística con la residencial" en una barriada en la que la mayoría de viviendas son unifamiliares entre medianeras. El vicepresidente de la plataforma vecinal, Bartomeu Seguí, manifestó al término del encuentro con el conseller Iago Negueruela, que el análisis que realizan después de convivir un año con la aplicación de la regulación del alquiler turístico, actividad permitida en viviendas unifamiliares entre medianeras, "es que la propia ley que permite esta actividad, agrava esta incompatibilidad de usos". Ello es así, según Seguí, porque no se establece un límite de plazas que se pueden autorizar en cada vivienda, dándose el caso que "hay casos con 12, 14 y 16" plazas autorizadas. Además, en numerosas ocasiones se dan casos de sobreocupación y de sobreoferta. Tampoco se pone límite a la densidad máxima que, como consecuencia de esta actividad, se pude permitir en una determinada zona o calle, pese a que lo anterior no es competencia de Turismo, aunque sí del Ayuntamiento. Los vecinos han denunciado la actividad de cinco viviendas de una misma empresa.
