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Entrevista

Aina Soler Crespí: "Hubo consenso en Son Busquets, pero ahora las propuestas son más tímidas"

La arquitecta y urbanista participó en la creación del concurso de ideas sobre el antiguo cuartel

Aina Soler cree que el "urbanismo con perspectiva de género no significa victimizar a la mujer". B. ramon

Aina Soler Crespí -Palma, 1989- es arquitecta, formada en la ETSAB de Barcelona y en la Politécnica de Madrid hizo el máster en Urbanismo y Ordenación del Territorio. Ha estudiado también en la Aalto University. Regresó a Mallorca y ha trabajado en distintos despachos. Ahora está en el ayuntamiento de Andratx. Es integrante de los Joves Arquitectes de Mallorca (JAM) y, junto a ellos, ha impulsado dos iniciativas urbanísticas importantes en Palma: Som sa Pressó y el concurso de ideas 'Explotam Son Busquets'. Con un nuevo gobierno municipal, al frente del socialista José Hila, que fue regidor de Urbanismo durante el proceso de plantear alternativas, ante el interrogante qué va a ocurrir en una de las áreas donde se debería perfilar otra manera de hacer ciudad, Aina Soler quiere ser optimista, aunque reconoce que "tras alcanzar consenso, ahora las propuestas son más tímidas".

P ¿Qué le pide al nuevo equipo de gobierno? ¿Qué se quedó sobre el papel?

R En la última legislatura se avanzó en algunos aspectos pero han quedado cosas pendientes, entre ellas conseguir espacios para caminar, hacer una ciudad más transitada por peatones. Falta luchar por la vivienda, por el patrimonio de Palma. En Son Busquets reivindicamos un nuevo modelo de ciudad, es un laboratorio en una ciudad en la que quedan pocos espacios donde poner en práctica otro tipo de vivienda con una edificación más sostenible.

P ¿Por qué se involucró JAM?

R En realidad fue ARCA (Associació per a la Revitalització dels Centres Antics) quien tiró del hilo con el PERI paralizado desde 2011. En estos diez años surgen nuevas maneras de usar las cosas, las ciudades deben decrecer en el número de coches, por tanto, está desactualizado y no ofrece posibilidad de cambio por su ubicación al lado de la vía de cintura, pensamos que podría ser ejemplar por su memoria histórica, por su tamaño.

P Su concurso de ideas parecía utópico.

R ¡No lo es; es bastante real e innovador! Dejó claro que las ideas ganadoras eran correctas y que podrían llevarse a cabo, cumplían la normativa.

P Y ahora ¿qué va a pasar con todo ese esfuerzo?

R Sería bueno, y es un reto, conseguir que este suelo continuase siendo público y que se destinara a viviendas. Si el suelo no está gestionado desde aquí, será más complejo. Ha de ser vivienda pero se ha de ser valiente y apostar por un modelo que no repita que vivienda pública construida con fines sociales al liberalizarla, deja de cumplir esta función. Se ha de apostar por vivienda pública de alquiler o de cooperativas u otros modelos; no el especulativo.

P ¿Cuáles son los retos urbanísticos de Palma?

R Movilidad, vivienda y descentralización de la ciudad. Se ha hecho esfuerzo para ir hacia fuera con peatonalizaciones en Blanquerna y otros ejes, pero faltan. Palma es una ciudad caminable. Su tamaño permite ir caminando por todo. Al ser capital de provincia dispone de muchos servicios. Las ciudades medianas son las que ofrecen mejor calidad de vida, mientras que las grandes evidencian la desigualdad. Diría que a Palma le falta centrarse en un plan de aceras, son muy estrechas, dificultan el paso de los peatones. El transporte público debería ser más rápido, eficiente, quizá con más autobuses y más pequeños, y que el transporte urbano e interurbano vaya por dentro. Y a Palma le faltan espacios verdes.

P ¿Cree que el urbanismo debe tener perspectiva de género?

R Sí, creo que se ha de aplicar. Hablar de la ciudad feminista no significa victimizar a la mujer sino que los roles han sido distintos, las trayectorias diferentes en ciudades que han sido pensadas por y para hombres. El papel de las mujeres se ha de reconocer no desde la vulnerabilidad.

P ¿Palma tiene perspectiva de género?

R Le queda camino, porque aún falta asumir el tema. Se han hecho algunas acciones que lo fomentan. El urbanismo es lento, anónimo y es una disciplina transversal.

P Usted se presenta como urbanista ¿por qué?

R Soy arquitecta y me gusta, pero desde siempre me interesó más la relación del edificio con su contexto que el edificio en sí. El espacio público me interesa por cuanto es en él donde se materializan las relaciones humanas. El urbanismo pone el interés general por encima de cualquier cosa. Las personas dejan el campo y van a la ciudad para convivir. Dejan la soledad y empiezan a relacionarse. Es lo contrario a la autosuficiencia, dejas de lado intereses propios por el interés general. En la ciudad es donde se ven las diferencias y el urbanismo es la disciplina que debería reequilibrar las desigualdades.

P ¿Joves Arquitectes aglutina el relevo generacional entre los arquitectos de Mallorca?

R Los Joves Arquitectes de Mallorca nació de la necesidad de hacer red entre nosotros, arquitectos formados fuera y más conectados con el exterior que con la isla. Me incorporé en 2017 cuando apenas tenía medio año de vida. Es un lugar de encuentro donde indagábamos la arquitectura de aquí porque nuestros referentes eran de fuera. Sí hay relevo porque han pasado los años y el contexto también. Creo que somos una generación más consciente y con más interés en hacer arquitectura sostenible.

P Se implicaron con Som sa Pressó. ¿Quedará en algo más que decorado para albergar la inauguración del Atlántida Film Fest o bailes de swing?

R Nos involucramos para activarlo. Ante un espacio que se caía pedíamos que lo impulsaran. Nuestro papel ya ha terminado. No somos activistas. Compartimos ideas, iniciativas. Ya se verá qué pasa.

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