El presidente de la Asociación de Amigos del Rastro, José Gilet, acusó ayer al ayuntamiento de Palma de desentenderse del mercadillo de Son Fuster y de no limpiar la zona. Un día antes, los empresarios de Son Castelló habían exigido a Cort que prohibiera este rastrillo por la cantidad de basura acumulada.

"Es un gueto que han querido quitar de dentro de Palma", afirmó ayer Gilet sobre el actual mercadillo que se instala los sábados en el aparcamiento de Son Fuster. Según explicó, hay gente "marginal" que acude a vender lo que encuentra en la calle y que lo abandona allí mismo porque no tiene donde guardarlo.

Gilet culpó al Ayuntamiento de no responsabilizarse de la limpieza de la zona ni de quitar las hierbas que crecen en el aparcamiento y donde se acumula basura. "Cuando no te queda nada y te vas al rastro, te mereces un respeto", tal como añadió el presidente de esta asociación.