En el polígono de Can Valero, está creciendo una generación de niños de 3 a 12 años educados al margen de los criterios del sistema tradicional. Es Nau Escola, creado en 2016 por Katia Martorell Martínez -Palma 1973- y un pequeño grupo de padres y maestros, con la idea de buscar otros caminos, otras formas, de educar y aprender. Ellos se mueven en la llamada educación alternativa. Una palabra clave es cuidar. En 2015, la conselleria de Educación balear homologó este centro de segundo ciclo de educación infantil y educación primaria.

Su directora, Katia Martorell, es el alma mater de esta escuela en la que año a año van creciendo los niños que empezaron desde los 4 años. Hoy tienen 10 años. Licenciada en Historia del Arte, trabajó durante nueve años en la Fundació Pilar i Joan Miró, en el departamento educativo. Antes dio clases de secundaria y bachiller en un colegio privado.

P De 'la Miró' a embarcarse en la Nau Escola. ¿por qué?

R Cuando organizaba visitas escolares en la fundación vi cómo trataban a los niños en algunas escuelas y no me gustó. Me quedé embarazada, y yo que soy de leer todo lo relacionado con lo que me pasa en el momento, me puse a leer libros de crianza. Leí sobre la escuela que hicieron en Ecuador Rebeca y Mauricio Wild y se me abrió el mundo. Mi hijo Bruno era un bebé y estuve buscando colegio para él y al comprobar que no existía nada en Mallorca, que el sistema era el mismo de siempre, fui dándole vueltas. Busqué a gente afín y surgió Nau. Puedo decir que responde a una necesidad personal: querer otra cosa para mis hijos.

P ¿Qué significa la marca "escola alternativa"?

R Nos alejamos de los paradigmas de educación tradicional basados en la transmisión de informaciones que le da el adulto al niño. Pensamos que el verdadero aprendizaje procede del interior, de las experiencias, de la emoción, de la conexión con la curiosidad. La neurociencia ratifica la importancia de los valores emocionales.

P ¿Cuántos alumnos hay en Nau?

R Es un proyecto familiar. 150 alumnos. No creo que suban más. Nau crecerá hasta 5º y 6º. Nos han dejado hacer crecimiento vegetativo. La ratio es de 10 niños por clase; los 28 niños por aula es una locura.

P ¿Sería extrapolable a la escuela pública su modelo?

R ¡Ojalá! Está empezando a existir una red de colegios que están aplicando modelos alternativos pero el problema es la ratio, demasiados alumnos por clase. Para reducirla, habría que invertir en educación y ¿qué partido lo hace de verdad?

P ¿Escéptica? ¿Qué piensa de los programas políticos en relación a la Educación?

R Lo primero que deberían hacer es rebajar la ratio y eso reclama inversión. Para mí el cambio de modelo tiene que ver en cómo se contempla el niño: que sea autónomo, crítico y sepa gestionar sus emociones. Eso le convierte en un ciudadano incómodo para algunos partidos políticos que no contemplan la educación de otra manera sino que insisten en ver al niño con madre que trabaja ocho horas, que produce y persiste en un modelo que está pensado como sistema de empresa. Una madre puede elegir lo que quiera, pero en mi opinión, la escoleta no es un lugar para un bebé de tres meses.

P ¿No se cumple con la conciliación familiar?

R ¡No existe! Conozco casos de mujeres que al pedir la reducción de jornada, les han echado de sus trabajos. Estamos lejos de modelos como el finés donde otorgan dos años de baja maternal repartida entre hombres y mujeres. Hoy existe debate sobre si la crianza debe ser más o menos larga y si favorece o no la liberación laboral de la mujer. Nos han vendido cosas liberadoras para mujeres y nos han engañado como a bobas. Es la mujer la que tiene que elegir.

P Con niños que pegan a sus padres y a sus maestros, hay quien cree que la sociedad es muy permisiva con ellos. ¿Qué opina?

R Mi sensación es que no lo es porque crea en eso sino porque no está presente: le pongo una tablet y así le tengo distraído. Si los padres no tienen presencia activa, los hijos de alguna manera te lo devuelven. ¡Qué hacen bebés con teléfonos móviles, si flipan con cualquier cosa...! Si les hacen adictos a la tecnología, algo puede acabar mal. A mí no me cabe en la cabeza que un hijo mío me pegue. Si tú lo cuidas, te va a cuidar. No es lo que decimos, es lo que hacemos. Y desde luego, hay que poner límites. En Nau Escola lo hacemos, desde luego.

P ¿Cuánto cuesta Nau? No todos pueden pagar una escuela alternativa privada.

R No se paga más que la cuota de 450 euros mensuales. Al Estado le cuesta más de 600 euros cada niño. Algo falla. Un colegio privado paga entre 700 y 1.000 euros. No creo que Nau sea elitista pero sí es cierto que los padres hacen un esfuerzo. La mayoría es de clase media baja que a la mínima que hay un déficit económico, se van a la pública. La peor crisis la hemos pasado este año, ¡y eso que dicen que hemos salido de ella!

P ¿Se han dado casos de acoso escolar en Nau?

R No. Hemos tenido amagos de niños que han llegado de otro colegio con sus peculiaridades y las hacían ver. Ahí es cuando pusimos atención. La escuela es tan pequeña que lo permite.

P ¿Coeducación y perspectiva de género en la escuela?

R Sí, cuidamos mucho el lenguaje pero tampoco nos volvemos locos. ¡No decimos mil veces niñas y niños! No ponemos etiquetas. Los patios no están copados por campos de futbol. A la que los quitas, suceden muchas cosas. Es una fuente constante de conflicto. Tiene un espacio mixto más pequeño.