La Policía Nacional ha abierto diligencias penales por un presunto delito de extorsión contra los autores de la ocupación de un inmueble nuevo, aún sin estrenar, sito en el número 23 de la calle Emili Darder de Palma.

Así lo confirmaron ayer tanto Cort, que se lo trasladó a la Asociación de Promotores de Balears en la reunión de Gerencia de Urbanismo, como el propio cuerpo policial que habría iniciado las pesquisas.

Desde el Ayuntamiento, el teniente de alcalde José Hila habría confirmado a los promotores que todo apunta a que en este caso la ocupación del inmueble no obedecía a una necesidad imperiosa de vivienda.

"El teniente de alcalde nos ha dicho que se han abierto diligencias penales porque estaríamos ante una actuación mafiosa más que ante una ocupación por necesidad", confirmó ayer Luis Martín, presidente de los promotores isleños tras una reunión de gerencia en la que, admitió, "les hemos planteado este asunto".

Como se recordará, el pasado lunes el propietario de este edificio de lujo ubicado en el barrio de Camp d'en Serralta, Juan Perelló, de Promociones Perelló, se personó a primera hora de la mañana acompañado de dos agentes de la Policía tras ser advertido de que el inmueble habría sido ocupado por varias personas, previsiblemente durante el fin de semana anterior.

Sin niños

Este diario pudo comprobar en persona la ocupación, al menos de la planta baja que comunica con la primera, así como hablar con varias de las personas que habrían allanado la vivienda. Estas justificaron su acción en que carecían de una casa para alojarse tanto ellos como su progenie, por lo que habrían procedido a ocupar el inmueble junto a sus hijos, afirmaron.

Esta circunstancia fue puesta en duda por el promotor. "En ningún momento ha habido ningún niño viviendo dentro del edificio. Tan solo han colocado un par de patinetes para que la Policía pensara que era así", estimó Perelló, que también reconoció que habría tenido que pagar para conseguir que los ocupantes desalojaran el inmueble, circunstancia que se produjo a primera hora de la tarde del lunes, tras una ocupación express de apenas dos días de duración.

Asimismo, los propios okupas reconocieron que habían intentado conseguir una contraprestación monetaria por parte del promotor por abandonar la casa y así "poder dar la entrada para conseguir una vivienda de alquiler". Este diario además fue testigo de cómo uno de los ocupantes le facilitó su teléfono móvil al aparejador de la obra, Carlos Pradas, para que éste a su vez se lo trasladase al promotor para, al parecer, negociar con él una cantidad por dejar libre el inmueble.

{C}

El propio Perelló, en declaraciones a este diario, confirmó más tarde el pago y dijo sentirse coaccionado: "Les he tenido que pagar cuando han entrado en mi casa forzando la puerta para robar", señaló justificando la aceptación de sus exigencias en que las cuatro viviendas de las que consta la promoción, una por planta de la edificación, ya estaban vendidas a personas que, añadió, "las necesitan y han hecho muchos esfuerzos para comprarlas".

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Los okupas de un edificio de Palma obligan al promotor a pagarles para desalojarlo
  • Ocupan al completo un edificio de nueva construcción en Camp d'en Serralta

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO