La quinta edición de la Fira del Llonguet llenó las calles antiguas de es Pil·larí durante las horas centrales del día para degustar uno o varios de los 16.500 panes típicos con comida (1.500 más de los previstos) elaborados por los 15 hornos participantes. Desde las 10 de la mañana, la afluencia de gente fue en aumento, antes o después de votar, y la mayoría de puestos no pararon de servir los panecillos palmesanos rellenos con combinaciones de productos tan curiosas como sobrasada con gambas, el llonguet caliente que resultó ganador del concurso convocado por los organizadores y preparado por la panadería La Corona.

El segundo premio recayó en el horno La Vida Dolça, que ofreció un llonguet de porcella y cebolla caramelizada con salsa coreana. Y el tercer galardón, en el horno y pastelería Terrasa, que también ofreció porcella en el panecillo, pero con vinagreta de membrillo y brotes tiernos. Los encargados de elegir los mejores fueron los chefs Koldo Royo y Shenquian Ye, de Ascaib (asociación de cocineros afincados en las Illes Balears), el presidente de la asociación de vecinos de es Pil·larí, Pedro Andrés Medina, y el dibujante Rafel Vaquer, autor de Tià Llonguet.

El alcalde pedáneo

La Vida Dolça fue premiada de forma indirecta por partida doble, ya que este horno es regentado por los hijos del conocido Miquel del Forn de sa Pelleteria, a quien dieron a título póstumo el premio honorífico Tià Llonguet. También recibió el galardón y numerosos aplausos del público Joan Salvà, el último alcalde pedáneo de es Pil·larí. Consiguió para el pueblo el colegio público y la llegada de la telefonía, y desde el escenario quiso agradecérselo a quienes le ayudaron, tal como afirmó. Justo antes se celebró el show cooking de llonguets gourmet, a cargo de los citados Royo y Ye, además de la chef Maria Salinas, que hizo un bocadillo de lechona asada ligada con mostaza y miel y acompañada con setas y cerezas.

Tras asistir a ambos actos, los paseantes tempraneros pudieron ver y comprar en alguno de los 50 puestos de artesanía repartidos por diversas calles. Los primeros eran los alumnos de 4º del colegio de es Pil·larí, que vendían todo tipo de objetos creados por ellos. Estaban preparándose para el proyecto educativo Icape, que se celebrará en Ciutat.

Los premios

1º: La Corona: Con un llonguet caliente de gambas con sobrasada.

2º: La Vida Dolça: Con uno de porcella y cebolla caramelizada con salsa coreana. Los herederos de en Miquel de sa Pelleteria recogieron el premio a su padre.

3º: Terrasa: También con un llonguet de porcella, pero con vinagreta de membrillo y brotes tiernos.

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