Ya sea por la proximidad de las elecciones generales, municipales y autonómicas, o porque se ha comprobado que dar pie a la generación de polémicas estériles no reporta nada bueno para el bien común, lo cierto es que este año el alcalde, Antoni Noguera, ha sido exquisito con el tratamiento de las fiestas religiosas de Semana Santa y ha intentado pisar los menos callos posibles. Por ello, ante la sorpresa de algunos, estuvo presente el Jueves Santo en Cort al paso del Crist de la Sang, y entregó en persona a sus portadores el tradicional ramo de rosas rojas, algo que, en años anteriores, hizo un concejal de la oposición por incomparecencia del equipo de gobierno. También restó protagonismo al Consell y a su presidente, Miquel Ensenyat, al colocar en el balcón de Cort el damasco y mantener abiertas las puertas de la casa consistorial.
Asistencia técnica desierta
La asistencia técnica que contrata el Ayuntamiento para proceder a la inspección anual del estado de los caballos de las galeras, ha quedado desierta debido a un fallo de forma de la única oferta presentada para la contratación de un veterinario especialista en equinos. Pese a lo anterior, desde el consistorio se asegura que la inspección anual sobre el estado sanitario de los caballos que prestan este servicio municipal no peligra, puesto que el problema se podrá solucionar en breve.
Pendientes del nuevo pliego de huertos urbanos
Es probable que acabe el mandato sin que se haya aprobado el nuevo pliego para adjudicar los huertos urbanos. El actual lleva años caducado.
