Representantes de la Associació de veïnats del Jonquet, con apoyo de la Federació de Veïns, se reunieron ayer con Francina Armengol para mostrarles su disconformidad con el Plan Especial de Protección del Jonquet que podría aprobarse en este próximo pleno.

No es novedad su oposición a un planeamiento que según ellos, "podría ser mejor", en función de que "no se atiende que el único barrio de Palma que cuenta con la protección de su declaración de BIC no se vayan a protegen de manera suficiente las visuales de la zona".

No es el único punto divergente ya que los integrantes de esta plataforma denuncian que "se pierda la calificación de equipo sociocultural de los molinos de Levante", así como su total oposición a la construcción de un edificio de una planta en la plaza del Vapor como "compensación al propietario cierre la discoteca, algo que nos parece bien, pero no permitiendo que la zona de jardín acabe siendo de uso privado y no de todos". "El molino de la plaza del Vapor debería quedar libre de añadidos", insisten.

Apoyados por el GOB, piden al actual equipo de gobierno que "mejore un plan que nos parece bien solo que nosotros somos partidarios de aplicar una interpretación más estricta de la normativa", indica el portavoz de este grupo de vecinos, Pep Balaguer.

Diez años se han necesitado para que el Jonquet obtenga una Plan Especial de Protección (PEP) de acuerdo a su condición de BIC con categoría de conjunto histórico. El Consell admitió a inicios de este mes las modificaciones hechas por Cort que afectan a la distribución de las edificaciones en el solar del Mar y Terra (detrás del edificio del Meliá) y que ahora se han subsanado.