Los representantes sindicales de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) formalizaron ayer la convocatoria de paros parciales los días 25, 27 y 29 de marzo y de huelga indefinida a partir del día 1 de abril, tras no haber aceptado el consejo de administración celebrado ayer la inclusión de exámenes para cubrir la bolsa de trabajo de conductor y mantener solo los méritos de los aspirantes.

La amenaza de movilizaciones se hizo ayer realidad ya que el presidente del comité de empresa, Joan Mestre, una vez concluido el consejo de administración al que no se le dejó intervenir, lo comunicó tanto a la delegación del Gobierno como al Tribunal de Arbitraje y Mediación de les Illes Balears (TAMIB), como es preceptivo.

Los miembros del comité en pleno se personaron ayer por la mañana en Cort con el fin de que su presidente participara en el consejo de administración, mientras que los demás integrantes esperaban fuera. No se les dejó acceder a las dependencias municipales por lo que solo pudo participar el sindicalista que forma parte de este órgano colegiado, quien leyó un escrito expusiendo la "indignación" de la parte social por los términos en los que se aprobaban las bases para formalizar el bolsín de trabajo.

Mestre, manifestó una vez más la total oposición de los representantes de los trabajadores a este proceso de contratación que "precariza el empleo en una empresa que debería ser, a día de hoy, ejemplar y modelo para el resto".

Insistió en que la decisión se había tomado por parte de la empresa de forma unilateral al aprobar un documento que "hipotecará el empleo en los próximos tres años en la EMT".

Resaltó que la selección consistirá en "un concurso sin examen, en el que solo se valoran los méritos de los aspirantes, discriminando con ello a todos los trabajadoras y trabajadores que anteriormente accedieron a la empresa tras la aprobación de un examen".

Por ello, aseguró que se trata de una "convocatoria condicionada que beneficia claramente a los trabajadores que están el sector del transporte regular y discrecional, impidiendo con ello a cualquier persona que esté en situación de desempleo y no tenga la experiencia en una empresa de transporte de viajeros pueda optar a las primeras plazas" del bolsín.

A juicio del presidente del comité, con esta actuación, la EMT está emulando "una típica práctica habitual en una empresa privada, por lo que se trata de una clara discriminación que atenta a los principios de igualdad, capacidad y mérito a la hora de presentarse a una convocatoria de empleo público". Por último, Mestre resaltó que es la primera vez en la historia de la empresa que se presenta al consejo de administración una propuesta de contratación de conductores que no cuenta con la aprobación del comité de empresa.

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