Los integrantes de la Plataforma de Vecinos de Son Espanyolet sospechan que los negocios de alquiler vacacional que ha montando el empresario noruegomontando el empresario noruego son "hoteles horizontales encubiertos", indicó uno de los integrantes de la Plataforma de vecinos que no ocultan "la crispación" que se vive en el barrio.

Los indicios que les llevan a pensar que estas tres viviendas de alquiler turístico de la empresa Alzina Living son "la oferta de servicios de restauración, una oferta de más de veinte personas en casas unifamiliares, bodas y otras actividades que exceden este tipo de negocio", enumeran. A ello sumar que en el número 40 de la calle Alzina, la última compra del negociante Erik Oren, los vecinos han visto cómo meten cocinas industriales. "¿Para viviendas vacacionales?", se preguntan indignados.

Fue en la fachada de esta casa donde aparecieron pintadas este lunes en las que se leía "¡váyase, en este barrio no lo queremos!", que fueron denunciadas a la policía por el propietario, y que se retiraron el lunes por la tarde. "No estamos de acuerdo con la forma, pero sí en el contenido. Resume la actual crispación que vivimos en el barrioactual crispación que vivimos en el barrio y ante la que la Administración no hace nada. Por ello decimos que el legislador es cómplice", añaden los afectados.

Al hilo de la pregunta de la portavoz adjunta de Podemos Laura Camargo ayer en el Parlament sobre este tema, la presidenta del Govern, Francina Armengol, pidió "respeto" hacia los inspectores de turismo. "Desde Turismo se hace el trabajo que pertoca en vigilancia del cumplimiento de la nueva normativa", concluyó la presidenta.