Casi 4.000 metros cuadrados de terreno protegido de es Carnatge propiedad de Endesa tendrán en breve pinos y sabinas plantados por trabajadores contratados por Càritas. La fundación que tiene la compañía eléctrica presentó ayer el plan de reforestación de esta zona situada junto a la sede de la empresa y al ANEI (Área Natural de Especial Interés) del espacio público, el único costero de Palma que no ha sido construido.
La fundación ha contado con la colaboración de la conselleria de Medio Ambiente del Govern y ha optado por rehabilitar el solar sembrando un 75% de pinos y un 25% de sabinas debido a que los primeros son "más resistentes y afables", mientras que la especie típica del litoral mediterráneo es "muy resistente cuando arraiga y crece, pero tiene gran dificultad" en hacerlo. La actuación durará dos años y los impulsores tienen en mente "combinar estas especies con otras de la zona, como el lirio de mar, el ginebró u otras de la finca pública de Menut".
