La Autoridad Portuaria multará finalmente a solo uno de los dos cruceros que el pasado verano fueron denunciados por el ruido que provocaron con la música en la cubierta hasta la madrugada mientras estaban atracados en el puerto de Palma, como informó este periódico en agosto. La APB inició un expediente sancionador a ambos buques, que ha concluido con una multa de 720 euros para uno de ellos -al principio era de 900- y con el apercibimiento del otro, ya que enseguida adoptó las medidas necesarias para no volver a hacer ruido, señalaron desde la entidad estatal.

En cuanto a la reducción de la sanción, se debe a que el capitán del crucero fue receptivo tras ser informado de este problema y modificó el atraque del buque para que la música no llegara a la zona urbana, tal como añadieron las mismas fuentes.