El área de Movilidad del Ayuntamiento de Palma ha comenzado la instalación de las tres cajas que albergarán el primer radar fijo que se colocará en el interior de la ciudad de forma aleatoria entre estos tres emplazamientos para regular la velocidad de los vehículos en las calles más transitadas y concurridas.
Se trata de una previsión incluida en la nueva contrata del mantenimiento de los semáforos de la ciudad, que también incorpora la instalación de los denominados "fotorrojos" que detectarán y posibilitarán multar a aquellos vehículos que se pasen un semáforo en rojo.
Las tres cajas se colocan en la calle Manacor, a la altura del Bingo Rosales, en el paseo Mallorca, en las inmediaciones de la estatua a Ramón Llull y en la calle Miquel Lladó, situada en la barriada de Son Rapinya, en la zona de colegios, puesto que se ha detectado el incumplimiento sistemático de los límites de velocidad en este punto.
En estos momentos se procede a la instalación de las cajas y, con posterioridad, se colocará la correspondiente señalización que, por ley, debe informar a los conductores de la existencia de un control de velocidad de estas características. Se prevé que este radar se ponga en funcionamiento en las próximas semanas. El aparato se va a colocar en función de las necesidades y de forma aleatoria, sin informar previamente a los conductores, en uno de estos tres primeros puntos.
Paralelamente la empresa adjudicataria del mantenimiento de los semáforos ya instala también el primer control denominado "fotorrojo" en un semáforo de la ciudad, que detectará y multará a los vehículos que imcumplan la obligación de parar cuando la luz del semáforo se ponga en rojo.
En este caso, según el concejal de Movilidad, Joan Ferrer, en función de los resultados derivados de esta primera instalación, que se pondrá en funcionamiento en las próximas semanas, se decidirá si se procede a la colocación de más mecanismos de estas caraterísticas en más puntos o no.
En estos momentos Movilidad no dispone de ningún control de velocidad fijo, si bien la Policía Local, desde hace años, utiliza un radar móvil, además del denominado multómetro, vehículo que puede utilzarse tanto para el control de la velocidad como para detectar automóviles mal estacionados o que no están al corriente de pago de las multas de tráfico, entre otros cometidos.
