Emaya y el vecino que denunció las obras en la calle Son Armadams han solicitado al juzgado que no se paralicen estos trabajos que, por otra parte, finalizarán en cuestión de días.

La empresa municipal ha informado que ambas partes han presentado el escrito ante el juzgado que había emitido la orden de paralización de las obras para que puedan continuar estos trabajos.

El vecino denunció en noviembre que las vallas de las obras de Emaya habían cerrado el acceso a su garaje y el de otros residentes en esta calle. El denunciante alegaba que su esposa tenía nula movilidad, debido a su estado de dependencia, y que necesitaba utilizar su aparcamiento.

La jueza del juzgado número 10 de primera instancia emitió la pasada semana un auto judicial con el que ordenaba la inmediata suspensión de los trabajos de Emaya. Sin embargo, la empresa municipal aseguraba hasta este lunes a mediodía que no tenía constancia de esta orden y prosiguió con las obras, incluso en fin de semana, cuando despejó el vado de aparcamiento del denunciante.

Ahora, ambas partes, de común acuerdo, solicitan que los trabajos acaben cuanto antes. Las previsiones de Emaya es que estén acabadas esta misma semana, por lo que considera que pararlas sería perjudicial para los vecinos.