El patrón de Palma está cada año mejor preparado para tratar con los niños y lo ha demostrado durante la mañana del domingo acercándose a ellos y dándoles lo que más les gusta, los juegos, los cuentos y las canciones.

El parque de sa Riera se ha llenado de pequeños por Sant Sebastià Petit en busca de los alicientes con los que disfrutar de una soleada, aunque ventosa jornada.

Muchas actividades estaban relacionadas con el protagonista de las fiestas, como s'Escarabat Sebastià, el tema musical del grupo Trencaclosques que ha hecho mover el esqueleto a los congregados, o el relato de Conte Contat, donde el dimoni Chewidimoni tenía que encontrar unos cuernos para poder asistir a los foguerons.

Sin embargo, como en toda fiesta infantil que se precie, lo más exitoso han sido los pintacaras, con colas de una veintena de niños y sus respectivos adultos a la espera de convertir los delicados rostros en flores, mariposas o dimoniots.

No le han andado a la zaga quienes han aguardado pacientemente en las filas para poder saltar en el castillo hinchable o montar en el tiovivo. De todos modos, ha habido hasta una veintena de actividades, por lo que los peques de la casa no han tenido excusa si no han encontrado su lugar de diversión en el parque.