Dibuja hasta el último detalle y eso en un balcón modernista, por ejemplo, significa perfilar flores y ribetes de las barandillas de hierro forjado, adornos de las baldosas hidráulicas o relieves en marés sobre las tradicionales persianas mallorquinas. Cuando se decanta por un balcón racionalista, las ilustraciones de Ferran Forteza son más sencillas, aunque igual de esmeradas. Este aficionado a la arquitectura y al dibujo ha unido ambas disciplinas artísticas a su amor por la ciudad y ha creado una página web, denominada Balcons de Palma, donde refleja cómo es esta urbe simplemente plasmando uno de sus múltiples atractivos estéticos.

Se centra en los elementos que "posibilitan que haya luz natural en el interior de los inmuebles y, a la vez, observar el exterior, una doble finalidad muy necesaria, que además aporta un gran valor añadido al paisaje urbano", afirma el autor de las imágenes. Es lo que le llama la atención cuando pasea por Ciutat y mira hacia arriba: "Muestran una manera de vivir, una arquitectura y una cultura mediterránea" y "nos permiten ver más allá, sin perder nuestra esencia, que no debemos olvidar", dice a modo de presentación en la página de internet.

Dichas palabras están precedidas por una sucesión de dibujos sin perspectiva, donde no se ven las tres dimensiones de los balcones, aunque se respetan al máximo los colores y detalles sobre un fondo de tonos pastel. "Me gustaba la idea de crear una imagen plana, sencilla, con un estilo particular, y ya llevaba tiempo rumiándola, hasta que en primavera surgió la chispa y empecé este reto. Es un proyecto que voy enriqueciendo poco a poco y aún no sé cómo acabará, pero lo estoy pasando muy bien", destaca Forteza.

Comenzó colgando las cuatro primeras ilustraciones que hizo: un balcón situado casi enfrente del cine Rívoli; otro del edificio Can Segura, entre la avenida Comte de Sallent y la calle 31 de Decembre; la Casa de les Mitges, en la calle Colom; y uno ubicado en el Call Jueu difícil de apreciar bien por la estrecha calle en la que está. La mayoría de los 12 dibujos publicados por el momento son de estilo modernista, como los de los edificios Can Forteza-Rey, Can Barceló o el conocido como el antiguo Bar Triquet.

El criterio que utiliza para escoger los balcones es "que tengan una cierta gracia arquitectónica, que llamen la atención por algo". Tras fotografiarlos, el ilustrador lleva a cabo la transformación durante su tiempo libre y en el proceso se ha dado cuenta de la importancia del trabajo que llevaron a cabo "profesionales como carpinteros o herreros, dos oficios muy ligados a los arquitectos, quienes les dejaban mucha libertad para hacer lo que quisieran". Ferran Forteza considera que "la gran aportación que hicieron a la arquitectura modernista no está suficientemente valorada", pese a que contribuyeron con sus formas enriquecidas a un estilo muy característico. Al dibujar, se pone "en el lugar del herrero que lo diseñó" y quienes observan el resultado tienen la sensación de trasladarse a otra época.

También ocurre si uno alza la mirada cuando pasea por Ciutat. "Pocos lo hacen, pese a que hay un patrimonio por descubrir y un paisaje urbano interesante que debemos agradecer a los antiguos arquitectos que construyeron esta y otras ciudades mediterráneas", concluye el autor de la página web Balcons de Palma, que tiene en mente un futuro de papel para sus creaciones.