El traspaso del servicio de grúa, que debía producirse el pasado día uno de noviembre por parte de Dornier a la nueva empresa adjudicataria Setex Aparki deberá esperar a la resolución de los servicios jurídicos municipales, pese a que el Tribunal Administrativo Central ha rechazado el recurso presentado por el sindicato CCOO contra la nueva adjudicación. La concejala de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, ha manifestado, no obstante, que si el pronunciamiento de los servicios jurídicos lo permite, es probable que el traspaso se pueda realizar a lo largo del próximo mes de febrero.
De esta forma se pondrá fin a una situación de precariedad en la prestación de este servicio que se considera primordial para la ciudad, ya que la actual concesión finalizó a mediados de 2017, los cuatro años de contrato más los dos de prórroga previstos. Cada día que pasa sin que se haga efectivo el nuevo contrato, supone un mayor coste del servicio para las arcas municipales y menores prestaciones para los usuarios, ya que la nueva concesionaria recibirá anualmente 300.000 euros menos que la actual. Por contra, la nueva contrata cobrará por servicio prestado e incluye la retirada de camiones pesados, la prestación de más servicios mínimos y la obligación de que entre junio a septiembre haya entre dos y cuatro grúas más en la calle que actualmente. Las retiradas se realizarán a petición de la Policía Local, aunque no será precisa la presencia física de un agente ya que se podrá autorizar por vía telemática.
