Las familias de las víctimas homenajeadas vieron ayer por primera vez los veinte Stolpersteine Remembrance Stones (Piedras de la Memoria) que se distribuirán en los municipios de Alaró, Algaida, Búger, Consejo, Costitx, Esporles, Inca, Manacor, Mancor de la Vall, Montuïri, Palma, Pollença, Porreres y Servera.

Los Stolpersteine son pequeños monumentos de piedra que inicialmente se dedicaron a la memoria de las víctimas del nazismo y que hoy se instalarán en Mallorca en memoria de las víctimas del franquismo. En total, diecinueve alcaldes fusilados y un presidente de la Diputación. Por este motivo el artista Gunter Deming las ha llamado Remembrance Stones ( Piedras de la Memoria).

El primer monumento se instala hoy en Porreres, a las 17 horas. Además de representantes institucionales también estarán presentes descendientes de Climent Grau, venidos de Brasil.

"Es necesario que la memoria perdure y que no olvidemos nunca las personas que lucharon por la democracia. Sus familias no lo han hecho, pero la ciudadanía también debe recordarlas y lo harán cuando paseen por las calles de Mallorca, y que nunca olviden lo que pasó España hace más de 80 años", declaró Jesús Jurado, del Consell. En la misma línea Maria Antònia Oliver recalcó que "de muchas de estas personas que hoy recordamos, no hemos podido encontrar ni fotos ni archivos. Pero hoy tenemos sus nombres, sus historias y ahora tenemos las piedras y ahora la gente que las vea se preguntará que pasó".

"Ya me puedo morir tranquila"

También asistieron a la presentación familiares de las personas homenajeadas, así como alcaldes, alcaldesas y representantes de los municipios que instalarán estos memorandos.

Francisca Mas, de noventa y cuatro años e hija de Joan Mas, Collet, alcalde de Montuïri, muy emocionada, fue la encargada de hablar en nombre de los familiares.

"Quiero agradecer muchísimo este gesto. Porque nos robaron nuestro padre, lo mataron y de esta manera todo Montuïri lo recordará. Ya me puedo morir tranquila", dijo emocionada.