La candidatura del PP para el ayuntamiento de Palma no está cerrada y continúa abierta. El exalcalde y exdiputado conservador, Mateo Isern, no ha dado aún su conformidad al presidente balear del partido y todo parece indicar que la duda no se despejará el próximo jueves, coincidiendo con la cena de Navidad. Habrá que esperar, afirman fuentes del partido, porque todo aún está "abierto, muy abierto". De hecho, se sabe que Isern ni siquiera es la única persona que ha sido sondeada por Gabriel Company, por lo que, en el caso de que finalmente dé su conformidad y su candidatura sea aceptada por los órganos nacionales del partido, ya no será el primer plato, sino el segundo o incluso el tercero. Al igual que Margalida Durán, en el caso de que finalmente sea ella la que vuelva a encabezar la candidatura en Palma. De todas formas, el ofrecimiento a Isern dejó completamente "estupefacta" a una buena parte de la militancia, hasta el punto de que los actuales responsables palmesanos del partido han de hacer de "cortafuegos" constantemente. Además, no todos están satisfechos de la gestión de Isern en Cort. Y si no, que se lo pregunten, por ejemplo, a los empleados próximos al PP de Emaya o a determinados sectores de la Policía Local.
Recogida de firmas en el Pont d'Inca
Los facultativos del Punto de Atención Continuada (PAC) del Pont d'Inca rechazan que, a partir del próximo 21 de enero, los 24.000 usuarios de Son Rutlan, Son Cladera i sa Indioteria acudan a este centro. A los vecinos de las barriadas palmesanas tampoco les convence la decisión unilateral del Ibsalut, por cuanto el compromiso era de que estos servicios se dieran en Son Rutlan.
