Los vecinos de Son Banya han anunciado que un análisis químico prueba que tanto la uralita destruida y la abandonada en el poblado durante los derribos contenía amianto. Su abogado asegura que este informe pericial se aportará al procedimiento penal, ya que tras las denuncia contra el Ayuntamiento y la empresa especializada Adalmo por un posible delito ambiental y sus consecuencias en la salud, hay en marcha una investigación judicial.

Gonzalo Márquez, abogado de las familias del poblado, informó ayer que un laboratorio ya ha confirmado la presencia de amianto en las muestras de uralita recogidas tras los derribos y en los tejados de las casas del poblado. A la espera de recibir el informe químico completo, el letrado ya anunció su intención de aportar estas pruebas a la denuncia judicial y a las presentadas ante Medio Ambiente y Trabajo.

Por su parte, desde el departamento de Bienestar del Ayuntamiento, ayer también confirmaron que el calendario de desalojos y derribos previsto hasta final de año se mantiene sin cambios. La previsión es que a principios de enero, como muy tarde, se hayan eliminado las 45 viviendas con orden judicial de desahucio, aunque quedan pendiente fijar la fecha para dos chabolas que no se derribaron el pasado día 10.