La portavoz de los populares en el Ayuntamiento de Palma, Marga Durán, ha anunciado este miércoles que el PP abandona el pacto político sobre la desmantelación de Son Banya tras la reunión mantenida ayer con la regidora de Servicios Sociales, Mercè Borràs. Según los populares, se les ha impedido acceder a la información demandada sobre la situación de las 18 familias en proceso de desalojo.

"Nos adherimos a un plan que daba cumplimiento a una sentencia judicial, y lo hicimos con el compromiso de una gestión transparente, un trabajo de campo pormenorizado y un análisis detallado caso a caso”, algo que según la edil “se ha incumplido sistemáticamente”, ya que “se nos ha denegado el acceso a la información, a la que únicamente hemos podido tener acceso por parte de los colectivos afectados”, ha manifestado.

"Hace diez días solicitamos información sobre una serie de familias que han quedado excluidas de las ayudas y no hemos obtenido respuesta”, ha declarado Durán, quien ha recordado que “en el mes de julio ya denunciamos que se estaba planteando realojar a familias en barrios vulnerables excluidos del plan como Virgen de Lluc o Camp Redó”.

El abandono del PP se produce días después de que saliera Ciudadanos, también por las mismas razones. Esta formación, además, ha exigido la dimisión de la regidora de Bienestar.

En este sentido, Durán ha explicado que grupo municipal popular “permanecerá vigilante con la gestión del equipo de gobierno relativa al desalojo de Son Banya” y ha anunciado que presentarán una propuesta para el próximo pleno del mes de noviembre en la que instarán al equipo de gobierno a mantener reuniones mensuales con la oposición para informar de la ejecución del Plan, a que no se produzca ninguna demolición sin que haya otra vivienda asignada; a que se realice un análisis de los casos familia a familia y a que se ponga en marcha un plan de integración para los colectivos afectados.