El precio medio del alquiler en Santa Catalina oscila entre los 1.200 y 2.000 euros, según un estudio realizado por el observatorio Palma XXI presentado esta mañana.
El análisis sobre la gentrificación del barrio palmesano también concluye que se ha producido un cambio en el tipo de hogares, ya que casi la mitad de la población vive sola (un 42,6%) y quienes se han instalado en los últimos años son principalmente "de origen nórdico, con hábitos de vida diferentes a los locales y con un estilo de vida cosmopolita", lo que provoca repercusiones en el mercado de la vivienda, según ha manifestado el presidente de la entidad, Jaume Garau.
Pese a que la población del antiguo arrabal ha crecido ligeramente en los últimos 12 años, sí se ha producido un significativo aumento del número de extranjeros en detrimento de los españoles, ya que han pasado de 1.492 a 2.713, una cifra que casi se duplica en poco más de una década. Por el contrario, el número de locales ha bajado de 7.198 a 6.365 personas.
Del estudio de Palma XXI se desprende que Santa Catalina ha pasado de ser "un barrio de ciudad" para convertirse en "una zona lúdica", en palabras de Garau.
