Arropada por pequeños ángeles y precedida por agrupaciones de ball de bot, xeremiers y carrozas procedentes de diferentes puntos de la isla, Adela Areito ha encarnado este sábado a Santa Catalina Tomàs en su Carro Triunfal durante el tradicional desfile hasta el convento de Santa Maria Magdalena.
Como siempre, el Carro Triunfal cierra el desfile que ha partido sobre las siete de la tarde desde el Paseo Mallorca para dirigirse al convento donde reposan los restos de la Beata desde 1574.
Horas antes, las calles de este recorrido y otras cercanas ya han sufrido los correspondientes cortes de tráfico y restricciones para aparcar.
Esta es una de las procesiones más tradicionales de las fiestas religiosas de Palma. Se celebra desde 1792 el tercer sábado de octubre y en ella las carrozas representan distintas escenas de la vida de la santa y su peregrinaje por diferentes conventos hasta que ingresó en el de Santa Magdalena.
Además del Carro Triunfal, que data de 1868, la procesión cuenta con todos los elementos de la cultura popular mallorquina, como dimonis, capgrossos, gegants, xeremiers y ciudadanos vestidos de payés.
