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Emaya

Retiran toneladas de residuos del PanAm

La comunidad de vecinos de la finca de Cala Major lindante a los Pullman pide a Cort que derribe las infraviviendas ilegales

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Retiran toneladas de residuos del PanAm de Cala Major

Toneladas de muebles, trastos, escombros, electrodomésticos y basura en general acumuladas durante años en el sótano de los dos bloques del edificio PanAm están siendo retiradas ayer y hoy a través del proyecto de Vivienda Digna que impulsa Cort en Cala Major. Operarios de la empresa municipal Emaya introducen el material en dos depósitos de 30 metros cúbicos cada uno tras ser trasladado con una grúa desde el patio de la finca. Ayer tardaron unas dos horas en llenar el primer contenedor, ya que antes realizan una selección de los residuos para poder reciclarlos.

La comunidad de propietarios del inmueble, situado al final de la calle Puig d'Alaró, pidió ayuda al Ayuntamiento para eliminar este auténtico vertedero y así se está haciendo con financiación de los fondos Feder de la Unión Europea para el Plan Litoral de Ponent. La basura fue acumulada por un presunto estafadoracumulada por un presunto estafador, ahora en prisión preventiva, acusado de alquilar viviendas de esta finca y de los Pullman que no eran suyasviviendas de esta finca y de los Pullman que no eran suyas. Además, "construyó ilegalmente una decena de infraviviendas, sin ventanas y conectadas a la luz y el agua de otro inmueble, y que aún están siendo arrendadas por sus familiares", tal como denunciaron desde la administración.

Su responsable solicitó ayer al consistorio que derribe de forma subsidiaria los espacios ilegales edificados en el PanAm, ya que llevan ocho años denunciando esta situación y no han logrado nada. También cree que "tendría que haber un mayor control de las okupaciones, porque los bancos propietarios se desentienden; y de los ruidos nocturnos por parte de la Policía Local".

El concejal de Urbanismo y Modelo de Ciudad, José Hila, dijo que entre esta finca y los Pullman "viven 2.000 personas, el 40% de la población de Cala Major, en condiciones muy mejorables", por lo que "dos trabajadores sociales y dos educadores están identificando cuál es la situación social de cada residente y, después, un arquitecto analizará el estado de las viviendas", resumió.

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