La aprobación inicial del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Palma se aplaza hasta el próximo mandato. Así lo ha confirmado hoy la portavoz del equipo de gobierno de Cort y concejala de Educación y Deportes, Susanna Moll, cuando ha explicado la contratación, por un 1.194.000 euros del equipo Ezquiaga Arquitectura Sociedad y Territorio S.L para el servicio de asistencia técnica para los trabajos de redacción y asesoramiento de la revisión de este documento urbanístico.

Por su parte, del director general de Urbanismo, Gabriel Horrach, ha justificado la necesidad técnica de contratar a este equipo externo para los próximos cuatro años con la posibilidad de una prórroga de dos más, debido a que el Ayuntamiento carece de determinados "perfiles técnicos" para la elaboración de los documentos que deben acompañar el nuevo planeamiento en aplicación de la Ley Balear de Urbanismo, en vigor desde enero del presente año.

En concreto, se necesitan ambientólogos, geógrafos, economistas, ingenieros industriales y demógrafos para redactar la distinta documentación requerida y que Cort, o bien carece de ellos, o bien se deben dedicar al trabajo del día a día y no son suficientes para el de prospección y análisis que requiere la redacción de un nuevo Plan General.

Asemás, Horrach ha argumentado que "si ahora se aprueba inicialmente el plan deprisa y corriendo para disponer del documento antes de que finalice el presente mandato, nos encontraríamos ante un plan completamente desfasado", puesto que debería incorporar las leyes y disposiciones aprobadas o en tramitación por el Parlament o el Consell como la Ley Turística, la de la vivienda, la de Urbanismo, la Agraria, la de cambio climático, el Plan de Equipamientos comerciales de Mallorca o el PIAT.

Moll ha afirmado que la intencón del equipo de gobierno es la de dejar a punto la documentación necesaria para la aprobación inicial del nuevo planeamiento antes de finalizar el presente mandato de tal forma que se pueda aprobar en los primeros meses de la próxima legislatura y proseguir la tramitación hasta su aprobación definitiva, que probablemente se prolongará durante varios años más.

El Plan General que actualmente está en vigor es el de 1998, por lo que sus previsiones urbanísticas están completamente desfasadas, de ahí las sucesivas modificaciones puntuales que ha ido sufriendo.