Las playas de Can Pere Antoni y Ciutat Jardí vuelven a izar la bandera roja debido a un vertido de aguas pluviales y residuales procedente de la estación impulsora del Baluard y el torrent Gros debido a las lluvias intensas registradas durante la madrugada de este lunes. Estos arenales de Palma han tenido que ser cerrados al baño en ocho ocasiones en poco más de un mes.

Los técnicos de Emaya han recogido muestras para analizar la calidad del agua. Hasta obtener los resultados de estas analíticas, el Ayuntamiento de Palma ha anunciado que las dos playas permanecerán cerradas" por precaución".

Esta es la octava vez que ondea la bandera roja en las playas palmesanas en un mes, lo que ha motivado convocatorias de protestas vecinales contra Cort, como la prevista para el próximo 21 de septiembre.