La nueva depuradora del Coll d'en Rabassa debería comenzarse a construir el próximo año y su coste, de entre 80 y 100 millones de euros, corre a cargo del Ministerio de Transición Ecológica. Tras los reiterados episodios de lluvias y consecuentes vertidos en el mar, desde Emaya se le ha pedido "agilidad y urgencia" para que no se alarguen los plazos, indica Neus Truyol, responsable de la empresa municipal.
"Se está redactando el anteproyecto de la depuradora y existe una relación continuada entre técnicos de Emaya, el Ministrio y la empresa adjudicataria", asegura Truyol.
Cabe recordar que el proyecto se remonta a anteriores legislaturas y que cuando se inauguró la depuradora de Sant Jordi, alrededor del año 2002, ya se hablaba de la necesidad de ampliar la planta del Coll. Posteriormente, se compraron los terrenos, junto a las actuales instalaciones, y se trabajó en un proyecto que el Ministerio de Medio Ambiente rechazó, hasta que por fin sacó a licitación la redacción de un nuevo anteproyecto.
Truyol recuerda que desde el otoño de 2015, tras el cambio de gobierno municipal, se reclamó la construcción de la nueva depuradora. El alcalde de entonces, José Hila, y un directivo de Emaya viajaron a Madrid. "Se reclamó financiación y agilizar la puesta en marcha del proyecto, que finalmente se ha conseguido", apunta Truyol.
El Gobierno de Pedro Sánchez "se ha encontrado el proyecto en marcha, en fase de redacción del anteproyecto, y lo que pedimos es que se mantengan los compromisos adquiridos", explica la presidenta de Emaya. "Les hemos trasladado la problemática de los vertidos de este verano y tienen información actualizada continuamente. Por eso les pedimos que se priorice este tema y no se alarguen los plazos para que el proyecto se pueda tramitar con la agilidad y urgencia que requiere la situación del saneamiento en Palma", remarca Neus Truyol.
