El Ayuntamiento de Palma ha explicado esta mañana que la usuaria del Servicio de Acogida Municipal (SAM) Familias Juana Mendoza tiene que dejar las instalaciones el próximo jueves porque tiene trabajo, ahorros “considerables” y ha rechazado una vivienda en condiciones y acorde a sus necesidades, “motivo suficiente para salir”, tal como ha afirmado la regidora de Bienestar Social, Mercè Borràs, durante una visita al SAM Familias.

El edificio tiene capacidad para 14 familias con hijos menores (el 80% son monomarentales) en situación de “emergencia social” y actualmente hay dos en lista de espera urgente, por lo que Cort da prioridad a estos casos frente a los que están “en condiciones para salir”, como Juana Mendoza, según ha especificado la responsable política.

En la visita al equipamiento municipal han mostrado las zonas comunes, como la ludoteca, y los estudios donde viven las usuarias con sus hijos, entre ellas Lidia Martins, quien ha explicado que lleva desde principios de año tras vivir en la calle con su hija y ha agradecido la ayuda recibida para salir adelante.