Tras las quejas vecinales de varios residentes de la zona alta de la calle Blanquerna, la fuente que hay junto a la escultura de la plaza París empezó a ser reparada ayer por un operario de la empresa contratista de Parques y Jardines. Los denunciantes criticaban que la base estaba llena de desperdicios y encharcada con hasta un palmo de agua, por lo que era un foco de atracción del mosquito tigre, ya que suele estar en zonas con poca agua. El trabajador retiró diversos restos de botellón, ya que es un punto de encuentro de grupos de jóvenes por la noche, y reparó los surtidores de la fuente, junto a la que se halla la escultura de Rafa Forteza.