La Asociación de Supermercados y Distribuidores Comerciales (ASODIB) planteó al tribunal que se adoptara una medida cautelar para evitar el desarrollo de la normativa aprobada por el Ayuntamiento de Palma. La patronal del sector afectado por esta norma entendía que los perjuicios económicos podían ser muy elevados si no se prohibía, hasta que se analizara en profundidad la demanda, dicha norma. Los jueces denegaron dicha medida cautelar, pero se abogó por llegar a un acuerdo con los sectores implicados. Varias asociaciones afectadas por la ordenanza denunciaban que no tenía ningún sentido que en la ciudad de Palma se prohibiera la entrega de bolsas de plástico de un solo uso, mientras que en los comercios de otras localidades de Mallorca se podían distribuir sin ningún problema. Los jueces recuerdan que esta normativa municipal representa una declaración de voluntades, con el intento de que se aplique por consenso.