La asociación proteccionista ARCA lamentó ayer que el Ayuntamiento de Palma no haya propuesto "ningún proyecto de conservación" del patrimonio en el que invertir a través del impuesto de Turismo Sostenible, también conocido como ecotasa.

Estas declaraciones responden a la solicitud que Cort realizó al Govern para emplear ocho de los 60 millones del impuesto para la financiación de tres proyectos, que son rehabilitar el Parc de la Mar, adquirir viviendas para colectivos vulnerables y comprar al menos 24 vehículos eléctricos para sustituir los de gasoil, que tienen más de 18 años de uso.

ARCA afirmó que estas propuestas evidencian "el nulo interés que tiene el gobierno municipal hacia el patrimonio cultural de Palma, como es el caso del edificio gótico de Can Serra, que se encuentra totalmente abandonado". Considera además que con la ecotasa se debería invertir en "medio ambiente", que es para lo que inicialmente fue creada. Sin embargo, "las administraciones presentan cualquier tipo de proyecto" para utilizar este presupuesto, criticó la asociación.