La Fira Ran de Mar y el Molinar, donde se celebraba, tienen vidas paralelas. Un grupo de vecinos empezó a organizar el encuentro hace una década "para dinamizar el barrio y hacer vida social, ya que estaba desapareciendo debido al inicio de la gentrificación", como recuerda Toni Perpinyà, uno de los impulsores. El éxito de la feria artesanal y marinera creció de año en año, por lo que la labor de preparación del evento se volvió tan ardua que la ilusión del medio centenar de voluntarios se fue apagando poco a poco hasta que este verano decidieron retirarse y pasar el relevo de la consolidada feria a la asociación de vecinos Born del Molinar.

"Dijeron que la mantendrían como era, tradicional y artesanal, pero al final su propuesta busca un beneficio económico, con una veintena de paradas de comida y bebida, por lo que no se conserva el espíritu del barrio", explica el presidente de s'Embat, que junto a las entidades Dones de Bauxa, Es Picarol y s'Illeta organizaban Ran de Mar. La gentrificación está en pleno apogeo en el Molinar y ha llegado incluso a los eventos sin ánimo de lucro.

El nuevo organizador, Miquel Obrador, alega que es "imposible" hacer la feria con las condiciones del Ayuntamiento, que es quien pone la infraestructura. Le pide "redimensionar" la propuesta, "que preserve el espíritu que se había mantenido hasta la última edición y que se adecúe más a las características del barrio". Pero el Born del Molinar ha renunciado y el encuentro no se celebrará.

"Es una lástima que se pierda, porque era un escaparate para los artesanos", afirma Catalina Pons, de la entidad vecinal Vogar i Ciar. Sin embargo, no le atrae nada la nueva idea, ya que "desvirtúa la intención inicial, solo busca un rendimiento económico y traería ruido, molestias y más coches al barrio", resume Pons. "Si quieren montar una feria como las que hay en el resto de Mallorca, que lo hagan en otro sitio y sin la ayuda del Ayuntamiento", añade.

Toni Perpinyà lamenta que "el Molinar de siempre, el que tantos aman, se está perdiendo", aunque todavía mantiene la esperanza en la continuidad de Ran de Mar, ya que "los artesanos, los pintores, los de las habaneras, el ball de bot y la vela latina preguntan qué pasa con la feria. Tal vez nos reunamos todos para tratar de recuperarla el próximo verano", avanza.