El pasado sábado, una gran rama de un centenario ombú se desprendió sobre un coche, causando heridas leves a su conductor. El Ayuntamiento de Palma estima que cerca de un 5% del arbolado requiere podas más intensivas para evitar este tipo de incidentes. Los que presentan mayor riesgo son esencialmente ficus con patologías concretas y olmos del total de 58.130 árboles que hay en la ciudad. Cort ya está actuando en los ejemplares de once calles y espacios públicos, a la espera de nuevas inspecciones.

El Servicio de Parques y Jardines está podando de manera intensiva olmos y ficus desde hace semanas, especialmente después de que el pasado mes de mayo se produjera "un número significativo de caída de ramas de las distintas especies de olmos, principalmente Ulmus pumila y Ulmus umbraculifera, en calles y zonas de alta transitabilidad", como la que tuvo lugar en Eusebio Estada, informan fuentes municipales.

Lugares de actuación

Las podas de reformación ya se han realizado en ficus de la calle Joan Miró, "atendiendo a criterios de mejora de la seguridad del arbolado, no por razón de servidumbre de vistas", indican desde Parques y Jardines. También se incluyen en estas podas los Ficus elastica del paseo Marítimo y un Ficus nitida en el parque de sa Quarentena.

La poda de reformación es la que experimentó el gran ficus de la plaza de España el pasado mes de noviembre, después de que este ejemplar sufriera la caída de seis ramas, con el consiguiente peligro.

En cuanto a los olmos, los técnicos municipales ya han actuado en Eusebi Estada y Emili Darder Batle; también se está actuando en las calles Despuig, Josep Darder Metge y se actuará en la calle Manacor, Frai Juníper Serra, carretera de Valldemossa, General Ricardo Ortega y en el parque de ses Veles.

Además, se están revisando otras calles y zonas verdes y, dependiendo de los resultados, se podría actuar con los mismos criterios.

Las podas de reformación y talas, en caso de que no haya alternativa, se realizan después de que los técnicos especialistas hayan inspeccionado cada ejemplar, desde el suelo y en altura, revisando el nivel de riesgo, diana, avance de podredumbres, roturas anteriores y otros antecedentes, detallan desde Parques y Jardines.

El Plan de Gestión del Arbolado se aprobó en 2012 y el Servicio de Parques y Jardines es el responsable del patrimonio verde de la ciudad, indican desde este área. "Las estrategias empleadas se basan en técnicas de arboricultura urbana y no atienden a injerencias o peticiones individuales o políticas, sino a criterios técnicos de los responsables del arbolado", remarcan desde el servicio de mantenimiento de árboles.