Pere Garau es el barrio de Palma con mayor población "y el más descuidado por el Ayuntamiento". Los representantes de los 30.000 habitantes, cifra que les equipara a Inca, según los vecinos, exigen a Cort que "cumpla sus promesas" y construya el Casal de Barri y el nuevo centro de salud prometidos.

"No nos conformamos con promesas. Cort las está incumpliendo todas. No descartamos hacer alguna movilización después del verano", expresaron ayer Raúl Rejas, de la asociación de vecinos de Pere Garau; Joana Ferrà y Pamela Forteza, de Flipau amb Pere Garau; Athanasia Kadogbou, del AMPA del colegio Sant Francesc d'Asís; y Pep Bonnín, presidente del mercado de Pere Garau. Todas estas entidades, junto a Achinib, exigen a Cort que dé soluciones. Pere Garau quiere hechos, no palabras.

Los vecinos recordaron que los sucesivos equipos de gobierno no les han dado "soluciones" cuando se habló de la antigua Ferretería Mateo como posible lugar donde hacer el Casal de Barri. "Nos mintieron, porque ya estaban en marcha los trámites para alquilarlo", dijeron. También la partida de 60.000 euros de presupuestos participativos "que nadie ha visto", tal como añadieron.

Según ellos, este pasado miércoles el alcalde, Antoni Noguera, señaló que "este mes se hará un concurso público para encontrar un lugar para el Casal de Barri. Nosotros no queremos una solución a corto plazo. Noguera dijo que a largo plazo lo intentarán con el Metropolitan para albergar también ahí el centro de salud".

Los vecinos siguen quejándose de la suciedad del barrio que, aunque ha mejorado un poco, sigue dejando mucho que desear. "No es un barrio saludable. En el centro de salud se han visto ratas y cucarachas. El Ayuntamiento reconoce que se ha quedado pequeño pero sigue sin hacer nada. Cort no invierte nada en Pere Garau", protestaron.

En positivo

Con todo, el colectivo que representa al barrio con mayor diversidad cultural de Palma presentó a Cort iniciativas en positivo, como una campaña de educación sobre limpieza en el barrio. "Hemos visto cómo se dejan trastos en la calle de manera incívica. Llegan con furgonetas y las tiran", dijeron.

Recordaron asimismo que Pere Garau es la segunda zona más contaminada de Palma. Reclaman aparcamientos, zonas verdes. "Vivimos dentro de un gran garaje", expresaron elocuentemente los vecinos.