El área de Infraestructuras del Ayuntamiento de Palma está colocando unos mazacotes de hormigón en el Mirador de la Seu para que sirvan de soportes provisionales a los báculos que deben soportar el nuevo sistema de iluminación de que dotará a la Catedral.

Estos soportes de hormigón serán retirados una vez realizadas las pruebas de la nueva instalación, pendiente de que el proyecto sea aprobado por la comisión del Patrimonio del Consell y por el Cabildo de la Catedral. No obstante, el concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento de Palma, Rodrigo Romero, espera que los trabajos puedan iniciarse antes de finalizar el año.

La sustitución de la iluminación ornamental de la Catedral se incluye como una "mejora" en el nuevo contrato de mantenimiento del alumbrado público de la ciudad, por lo que no tiene un coste directo para las arcas municipales, aunque se calcula que supondrá una inversión de 500.000 euros.

Se pretende cambiar el actual sistema de iluminación del monumento, basado en lámparas de mercurio por inundación por otras LED de bajo consumo y que, además, permitirán resaltar los elementos más característicos del edificio.

Se trata de un sistema similar al implantado recientemente en el puente de Londres o en la catedral parisina de Notre Dame.