La Federación d'Associacions de Veïns de Palma quiere que la suspensión de la concesión de licencias de establecimientos turísticos que afecta al centro de la ciudad, Santa Catalina, el primer Eixample y el Nou Llevant continúe en vigor más allá del próximo 27 de julio, fecha en la que finaliza la moratoria.

El presidente de la federación vecinal, Joan Foteza, explicó que su entidad va a solicitar que la prohibición de la concesión de licencias, tal como se contempla en la moratoria aprobada hace un año, se incorpore en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) como modificación puntual.

Forteza explicó que en estos momentos se dan las mismas circunstancias que se daban hace un año, cuando se decidió aprobar la moratoria de establecimientos turísticos en estas zonas debido a la avalancha de solicitudes que se habían presentado en poco tiempo. Recordó que, de las 68 solicitudes existentes cuando se aprobó la moratoria, se han ejecutado "entre diez y doce" establecimientos turísticos y que, cuando estén todos en funcionamiento, sumados a los ya existentes, "habrá 101", que sumarán más de 4.000 plazas, cifra que se considera suficiente para este tipo de oferta de hoteles de ciudad.

Forteza es partidario de que se permita el uso hotelero en edificios catalogados siempre que se cumplan las condiciones incluidas en la moratoria actual. Es decir, que el establecimiento resultante de la conversión del Casal en establecimiento turístico, además de tener una categoría cinco estrellas, no sustituya a más de tres viviendas, y que la superficie media de las casas a sustituir sea superior a los 300 metros cuadrados. Además, estos hoteles boutique, que no están afectados por la moratoria y que se pueden continuar autorizando, deben tener un máximo de 20 habitaciones.

La moratoria de establecimientos turísticos en las anteriores zonas citadas finaliza el próximo 27 de julio. El teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, José Hila, manifestó hace varias semanas que, antes de que la suspensión se levante, el equipo de gobierno habrá decidido si se mantiene en las mismas zonas la prohibición o se introduce algún cambio en función del estudio encargado a una empresa externa, la misma que analizó la zonificación del alquiler turístico vacacional y propuso la prohibición en toda la ciudad de este tipo de arrendamiento en pisos.

El equipo de gobierno aún no dispone de la propuesta, aunque es muy probable no difiera de las limitaciones incluidas en la moratoria actual.