El proyecto de urbanización en Son Bordoy, con las condiciones que en su momento le impuso Cort, todavía no ha llegado a la conselleria de Territori, que es la que debe aprobarlo definitivamente, según confirmaron ayer fuentes del Ejecutivo balear.

Sobre este proyecto, también ayer el ayuntamiento de Palma quiso mantenerse al margen, alegando que quien tiene la competencia sobre este tema es el Govern. El proyecto de urbanización para su aprobación definitiva por el Govern puede presentarse en cuestión de semanas o un año, según explicaron desde la conselleria de Territori.

Tras la publicación ayer en este diario de que Cort había aprobado el proyecto de urbanización de Son Bordoy, el Ayuntamiento puntualizó en un comunicado que la Gerencia de Urbanismo había dado "el visto bueno al proyecto de dotación de servicios" de Son Bordoy en febrero de 2017, en el que se incluye la apertura de calles, la dotación de zonas verdes, el alumbrado y alcantarillado, entre otras cuestiones. Cort quiso marcar la diferencia entre esa dotación de servicios y la aprobación de la urbanización, cuestión que desde el consistorio recalcaron que "es competencia del Govern, ya que se trata de una Reserva Estratégica de Suelo".

Cort delega su responsabilidad en el Govern: "Quien tiene la competencia sobre este tema es el Govern, que incluso también tiene que aprobar la dotación que desde Urbanismo se ha contemplado. Si el Ayuntamiento no tramitara la dotación de servicios incurriría en prevaricación".

El ayuntamiento de Palma insiste en que su única competencia es la de dotación de servicios. "Esto no quiere decir en ningún caso que comiencen las obras ni que el consistorio haya acordado el proyecto porque para que esto el único competente es el Govern", reiteró ayer en el comunicado.