El presidente de la Unión de Usuarios del mercado municipal de Santa Catalina, Virgilio Izquierdo, ha rechazado que el denominado 'fenómeno del tardeo' les beneficie.

Moreno ha solicitado a la concejala de Sanidad y Consumo, Antònia Martín, que su departamento ejerza un mayor control sobre la actividad y los productos que se ponen a la venta en cada puesto, con el fin de que se mantenga prioritariamente la venta de carne, fruta y verdura, los productos de un mercado tradicional, que es lo que quieren seguir siendo.

Para el representante de la entidad a la que el Ayuntamiento le ha adjudicado la gestión del mercado municipal, la decena de puestos de venta que se dedican a la restauración y a la degustación de productos y que atraen a numerosos clientes a partir de las doce del mediodía de los sábados no benefician al resto de vendedores del mercado por varios motivos. En primer lugar, provocan la aglomeración en varios pasillos y en los accesos al mercado, que ahuyenta a los compradores tradicionales.

Asimismo, a partir de esta hora y debido a que a las dos de la tarde deja de aplicarse la ORA, en la zona se produce una falta de aparcamiento que también provoca la disminución del cliente tradicional, que se acercaba mayoritariamente al mercado los sábados alrededor de las 13 horas.

Izquierdo afirmó que saben que no es un problema que se haya creado en este mandato y que no tiene fácil solución, aunque piden la adopción de medidas por parte de la concejalía ya que, si bien los inspectores actúan, sus denuncias no se tramitan alegando que se está redactando un nuevo reglamento.

Mientras tanto, la concejalía, de acuerdo con los representantes de las uniones de usuarios que gestionan los cinco mercados municipales, ha lanzado una campaña de promoción con la que se pretende incentivar el consumo responsable.