La Associació per a la Revitalització dels Centres Antics (Arca) se opone a la decisión del Consell de Mallorca de modificar el proyecto de rehabilitación que el equipo de Elías Torres-Martínez Lapeña y de Sé Duch han propuesto para las torres del Temple. La justificación de la institución de que es "invasiva y no corresponde históricamente al edificio" es, según la entidad proteccionista, "una equivocación".

Arca entiende que sin la eliminación de la primera crujía del cuerpo, "el edificio no se entiende" al no verse las dos torres como elementos integrados en la fortificación defensiva.

"Estamos de acuerdo con el plan de Elías Torres como mal menor; nosotros siempre abogamos por la eliminación del cuerpo central entre las torres porque lo desfigura", indicó ayer Josep Massot, de Arca.

La ponencia técnica de Patrimoni rechazó el pasado 23 de marzo la actual propuesta que el arquitecto remitió a Cort y que modificaba sustancialmente su idea inicial, presentada en 2011 siendo Aina Calvo alcaldesa, y que acabó en el cajón al llegar el PP y los recortes de la crisis. Para Arca, sin embargo, la primera rehabilitación planteada por el arquitecto de Eivissa, responde a la realidad histórica del edificio.

Tanto Patrimoni como Arca se apoyan en fuentes historiográficas. De un lado, el Consell juzga que el proyecto actual de rehabilitación de las torres del Temple es "más invasivo", al restar buena parte del cuerpo central, y "no corresponder a las fuentes históricas, como los dibujos del archiduque Luis Salvador que sí dibujó la primera crujía del edificio".

Por su parte, Massot muestra los planos de Coello y otros, anteriores a los dibujos del archiduque, que "evidencian que ese cuerpo central que tanto respeta Patrimoni, y que no existía".

Además recuerdan que ya en 2005, cuando se declaró Bien de Interés Cultural, ya se indicó que el cuerpo central no es un elemento a conservar porque "altera la lectura del inmueble".

Por todo ello, consideran que la propuesta actual de Elías Torres "y su voluntad de recuperar la visión de las torres se ajusta más a la realidad histórica".

El Consell quiere mantener el cuerpo central que no es más que "un añadido de ladrillo que se puso tras caer una bomba en la Guerra Civil", dice Massot.

El proyecto de recuperación del Temple se va a financiar con el impuesto de la ecotasafinanciar con el impuesto de la ecotasa, 2,1 millones de euros. Cort quiere que se convierta en un museo de la ciudad, una idea que también ataca Arca. "Convertirlo en museo entraña añadir instalaciones que desnaturalizarán el edificio", opinan. La entidad aboga por el uso del edificio en sí como ocurre con las murallas de Alcúdia.