La asociación de vecinos de la Seu demandará a Cort porque permite aparcar los taxi-tour en la calle Palau Reial. Además, iniciará acciones penales por "presunta prevaricación contra los responsables de dictar el decreto [que autoriza dicho estacionamiento] al considerar que es una decisión injusta y contraria a la ordenanza de circulación de este mismo ayuntamiento", según informaron ayer en relación a esta modalidad de excursiones dirigida especialmente a los turistas procedentes de los cruceros.
La entidad vecinal del barrio catedralicio acordó en asamblea extraordinaria llevar adelante las actuaciones judiciales debido a que cree que la decisión del área de Movilidad es "incongruente", porque "restringe la circulación en el casco antiguo y, a la vez, se promociona y protege el servicio de taxi-tour de los cruceristas, a los que se facilita la circulación y estacionamiento en la zona de la Seu", tal como añade.
Argumenta que Cort "impide que los vecinos de Palma puedan ir a visitar la Catedral mientras que lo permite a los cruceristas y que los taxi-tour les esperen a la salida". Por este motivo, califica de "menosprecio" el trato dado a los residentes "frente a los grupos de presión económicos". Critica que el consistorio "negocia con las asociaciones de taxistas la ubicación de las paradas de taxi-tour sin invitar a los vecinos", a pesar de que "la Ley de bases del régimen local establece que las corporaciones facilitarán la más amplia información sobre su actividad y la participación de todos los ciudadanos en la vida local", según recuerda la entidad.
Asimismo, hace referencia al artículo 25.2 de la ordenanza de circulación, que establece que los vehículos de servicio público de viajeros pueden detenerse en un Área de Circulación Restringida (Acire), como ocurre en el barrio de la Seu, "únicamente el tiempo necesario para la subida y bajada de pasajeros". Se basará en esta normativa municipal, entre otras, para interponer una denuncia por presunta prevaricación, ya que el Ayuntamiento está incumpliendo su propia ordenanza.
La asociación de vecinos de la Seu se reunió con el alcalde de Palma, Antoni Noguera, el pasado 26 de marzo y uno de los temas principales que se trataron fue la falta de aparcamiento en el barrio. El primer edil reconoció que hay más coches que plazas, según el presidente vecinal, Luis Clar, y "dos días después, el 28, se firmó el decreto que se va a impugnar y que quita seis plazas de aparcamiento en el barrio a favor de los turistas de cruceros", tal y como destacó ayer el portavoz en una nota de prensa.
Seis plazas menos
Las seis plazas menos destinadas ahora a los taxi-tour están justo enfrente de los jardines del Palau March, dentro del Acire, y fueron señalizadas por el área de Movilidad el 12 de abril. La reserva de estacionamiento se adoptó tras una sentencia judicial que ordena al Ayuntamiento "que en la zona del Mirador, donde antes estaba señalizada la parada, se garantice que ningún vehículo aparque y que no se utilice como parada para el aparcamiento de taxis", como explicó Cort cuando colocó la señalización. La parada solo puede ser usada por los taxis con licencia para realizar recorridos turísticos y el horario es restringido, diferente en temporada alta y baja, y adaptado a los horarios de visita de la Catedral.
Los problemas de parking se iniciaron en 2016 con la prohibición de las 26 plazas que había en la zona del Mirador de la Seu.
