El Ayuntamiento de Palma, a través de su equipo de inspección tributaria, ha recuperado a lo largo del año pasado 6.674.342 euros de impuestos impagados.
Según el concejal de Hacienda de Cort, Adrià García, se trata de la mayor acción contra los incumplimientos fiscales realizada en los últimos años mediante las actuaciones de comprobación, inspección y regularización, lo que ha propiciado la mayor recaudación obtenida por este concepto del último quinquenio.
De hecho, si en 2017 se levantaron actas o se revisaron autoliquidaciones de impuestos y tasas por un importe de 6,6 millones, en 2016 la recaudación fue de 6,1 y en 2015 las arcas municipales ingresaron 4 millones.
Este incremento paulatino de la recaudación se debe a que se ha realizado una mayor acción inspectora en contra de estos incumplimientos. Según García, se prevé mejorar el servicio con la nueva licitación que está en curso.
La mayor recaudación con motivo del levantamiento de actas de inspección se ha dado en el Impuesto de Construcciones y Obras (ICO), con 3.143.030 euros. En este mismo apartado en 2016 se produjo una recaudación mayor ya que este año se levantaron actas por un importe de 4,1 millones, cifra que fue sensiblemente inferior en 2015, con 1,8 millones recaudados.
Le sigue la revisión fiscal de la tasa del Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos (TRSU), conocida también como tasa de incineración, cuya revisión ha supuesto recaudar 1.449.965 euros de recibos impagados. En este caso, el incremento de la recaudación por este concepto en relación a los años precedentes fue significativa, puesto que en 2015 se recuperaron 160.000 euros y 588.677 en 2016. Del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), que se aplica a las empresas con una facturación superior al millón de euros anuales, se levantaron actas de inspección por un importe de 1,2 millones de euros, frente a los 281.856 recaudados por este concepto en 2016 y los 664.434 de 2015. La revisión de las plusvalías declaradas por los vendedores de algún inmueble supuso el incremento de la recaudación en 228.805 euros a lo largo de 2017, de 377.578 en 2016 y de 923.468 en 2015.
Las actas levantadas como consecuencia de la revisión de las tasas abonadas por la ocupación del subsuelo supuso unos ingresos de 207.577 euros el año pasado y de 377.202 en 2016. En 2015, no obstante, no se ingresó nada por este concepto.
Las sanciones derivadas de las actas de la inspección fiscal levantadas supusieron un ingreso adicional para las arcas municipales de 187.890 euros, cifra inferior a la recaudada por este concepto en 2016, que fue de 273.394 euros y a la de 2015, con un importe de 371.835 euros.
Por último, por los intereses de demora derivados de las actas de inspección se ingresaron 179.083 eel año pasado, 72.185 euros en 2016 y 108.069 euros en 2015.
El concejal destacó la labor realizada por el servicio de inspección fiscal, puesto que su trabajo "garantiza la justicia tributaria y reduce la tentación de evitar cumplir con las obligaciones fiscales".
