El Terreno lleva casi un año con las obras de renovación de la red de agua potable paralizadas. La empresa contratada por Emaya tras un concurso público detuvo la nueva canalización por motivos económicos, ya que argumenta que "las condiciones que impone el Ayuntamiento respecto a la ocupación de la vía pública les hace perder dinero", por lo que la empresa municipal y la adjudicataria están negociando para llegar a una solución, como explicaron desde Emaya.

Ayer mantuvieron una reunión con la contratista, Aquambiente Servicios para el Sector del Agua, aunque por el momento continúa el desacuerdo. Los vecinos están a la espera de que el problema se solvente con la mayor celeridad posible, debido a que los tramos de calles del barrio que se hallan en obras siguen con las tuberías provisionales al aire libre. Están fabricadas con polietileno de alta densidad (PEAS), que es el mismo material utilizado para las futuras canalizaciones, pero las nuevas irán bajo tierra y las temporales están a la intemperie, un hecho que preocupa a los residentes, tal como destacó ayer el presidente de la asociación de vecinos de El Terreno, Xavier Abraham.

Las obras comenzaron antes del verano de 2016, contaban con un presupuesto de 1,5 millones y estaba previsto que durasen un año. La renovación de la red es una actuación muy importante y esperada por El Terreno debido a que la antigua canalización está muy mal y tiene fugas constantes. Con la mejora, se podrán evitar pérdidas de hasta 40.000 metros cúbicos, es decir, el equivalente al consumo de agua de alrededor de 300 familias.