"Debemos evitar que el exceso de visitantes mate el turismo". "No es turismofobia, pero queremos gestionar el problema de la mejor manera posible". El observatorio Palma XXI se mostró ayer así de contundente y recordó que "hace dos años se ponía en cuestión la saturación", un hecho que "ahora es evidente" e irá a más,
La citada entidad -que forma parte de Iniciatives XXI, en la que también está Tramuntana XXI- elaborará en los próximos meses un informe titulado 'Capacidad de carga turística: Estudio en los centros históricos de Palma y Valldemossa' donde contabilizarán cuántos visitantes pasean por el casco antiguo los días de cruceros y aquellos en los que no hay, así como las jornadas soleadas y las nubladas, tanto por la mañana como por la tarde; además de otros muchos datos.
El objetivo es "poner números sobre la mesa", en palabras del presidente de Palma XXI, Jaume Garau; "comenzar a traducir las percepciones de masificación en datos reales", añadió Joe Holles, secretario de Tramuntana XXI, ya que "los datos oficiales no reflejan lo que pasa en el día a día", según dijo la coordinadora del estudio, Maria Gómez, quien puso como ejemplo que "si se contabilizan las pernoctaciones en Valldemossa, no parece un pueblo saturado, aunque hay que estudiar lo que realmente ocurre", por lo que también analizarán detalladamente el municipio de la Serra.
Es la primera vez que se llevará a cabo un informe sobre ambos centros históricos y esperan que sea un referente y sirva finalmente para "encontrar soluciones a los problemas de masificación". En este diagnóstico de "la influencia de los flujos turísticos en la vida de Ciutat" no solo se analizará cómo afectan los cruceros, sino también el alquiler vacacional y la proliferación de hoteles urbanos con la intención de "ofrecer una herramienta que pueda servir a las instituciones y la sociedad sin llegar a un 'número mágico' sobre el límite de visitantes", tal como destacó Gómez. Por ello, esperan la colaboración de las administraciones públicas y ya se han puesto en contacto con los consistorios cuyos cascos antiguos estudiarán.
Presión de los cruceros
Centrándose en los cruceros, han visto que la presión que ejercen es la misma en mayo que en agosto, según advirtieron ayer en base a la previsión de escalas durante ambos meses. El próximo habrá en total 207.078 pasajeros y 72.400 tripulantes mientras que el mes más importante de la temporada desembarcarán en Ciutat 196.272 cruceristas y 67.500 tripulantes, una cifra ligeramente inferior a la de mayo. Abril tampoco se queda al margen de la gran afluencia de turistas procedentes de cruceros, ya que el jueves hubo cinco en el puerto de Palma y el martes día 24 se esperan otros cinco "con más de 24.000 visitantes", como dijo la entidad sin ánimo de lucro cuyo objetivo es reflexionar y diseñar el futuro de Ciutat.
"Ya hay destinos turísticos del Mediterráneo, como Dubrovnik (Croacia) y Santorini (Grecia) que están escalonando las llegadas" de estos buques, según indicaron y reclamó esta semana el alcalde, Antoni Noguera, al presidente de la Autoridad Portuaria de Balears, Joan Gual de Torrella.
