El Ayuntamiento de Palma, de acuerdo con la comisión técnica, propondrá al juzgado que la demolición de las chabolas de Son Banya se haga de forma escalonada, a razón de cuatro al día, a partir del momento en que se hayan adjudicado las obras.

La concejala de Servicios Sociales de Cort, Mercè Borràs, ha agradecido al juzgado que haya sido sensible a las demandas del Ayuntamiento y se haya autorizado el aplazamiento de las demoliciones de las primeras 45 familias.

Borrás ha aceptado que el aplazamiento ha sido consecuencia de la combinación de dos factores. Por un lado, el informe de la comisión técnica que aconseja el escalonamiento de los trabajos por motivos de seguridad tanto de las familias involucradas como de los funcionarios y los trabajadores de la empresa contratista. Por otro, por el hecho de que aún no se ha podido adjudicar el proyecto de demolición a una empresa contratista por parte del Ayuntamiento.

Según la concejala, se tenía un plan B para afrontar este hecho, consistente en el tapiado de las barracas desalojadas, que también ha sido desaconsejado por la comisión técnica al considerar que cada chabola se tiene que derribar inmediatamente después de haber sido desalojada para evitar que sea ocupada de nuevo.

Ahora se prevé iniciar los derribos a razón de cuatro al día inmediatamente después de que se hayan adjudicado las obras en aquellos casos que los ocupantes dispongan de otra vivienda y abandonen el poblado voluntariamente (ahora hay 12, con posibilidad de otras cuatro que están en estas condiciones).

En en los 29 casos restantes se deberá esperar a que el juzgado les notifique nuevamente el desahucio. La concejala ha recordado, no obstante, que entre que sea produzca el primer derribo y el último solo pueden trascurrir seis meses.