Entre nubes y claros, tregua. Son Ferriol volvió a registrar lleno en su XXVI Fira agrícola, ganadera y comercial celebrada ayer. Como reclamo, siempre los animales de razas autóctonas como el ca rater o el ca de bou o el ca de bestiar, entre los perros; junto a una cerda negra, al margen del bullicio mientras los lechones de dos días no paraban de mamar. Algunos niños se acercaron a acariciar a los 'negros' pero la mayoría se abstenía. Algunos niños de la urbe tienen miedo de los animales.

Entre la animada avenida del Cid, el paseíllo de Gigantes y cabezudos, al son de los xeremiers, y espoleados por un espantapájaros que no paró de dar brincos en el paseo que les llevó a la parroquia. El lugar donde a pocos metros se concentraron los demonios. El bien y el mal en vecindad.

No muy lejos quizá el espectáculo más aclamado, los juegos y doma española, con música enlatada de guitarra flamenca. Como la de Paco de Lucía.

Unas crías ofrecían un tartazo a 1 euro. "Es para el club de esplai", señalaron. Nadie quiere merengue en su cara. Sí, colgarse su nombre en granos de arroz, o llevarse a la boca los cremadillos con receta de Miquel del Forn de Pelleteria, cuyos hijos han rescatado las fórmulas. En La vida dolça.

El momento más emotivo de la jornada fue el descubrimiento de la placa que honra a Jeroni Pou, el marido de María Ana Bonafé, propietaria de la posesión que ha dado origen a Son Ferriol, cien años atrás, que en calidad de su oficio de letrado, negoció el reparto de parte de la finca, con el sacerdote Bartomeu Font. La reserva de 130.000 metros cuadrados permitió el nacimiento de Son Ferriol, un barrio de Palma con vida propia.

Con motivo del centenario de la fundación de esta zona de la ciudad se pudieron ver algunas fotografías que ilustran la historia de Son Ferriol. Abundan las de las ferias agrícolas y ganaderas, las de colegios y de deportes. Curiosamente, los años de la guerra civil ni figuran.

Entre atracciones de feria, puestos de comida y de venta de artesanías, se pudo escuchar la voz de la Apima CP Son Ferriol que llevan treinta años "a la espera de un instituto público".

Entre los políticos que quizá escucharon sus reclamos, estaban del equipo municipal, Joana Maria Adrover; Llorenç Carrió; Neus Truyol y Antònia Martín; de la oposición, los representantes del PP y de Ciudadanos. Y la diputada popular Marga Prohens.