Los residentes de Nou Llevant denuncian el creciente abandono de coches en la avenida de Mèxic y temen que esta práctica acabe consolidándose y la calle llegue a convertirse en "un cementerio de vehículos". Se trata sobre todo de automóviles accidentados o con las ruedas pinchadas, tal como estaban ayer cinco de los coches aparcados a ambos lados de la vía. Algunos llevan varios meses en el mismo lugar y han sido objeto de actos vandálicos. También tienen las puertas abiertas y en el interior se puede observar que hay latas y botellas vacías, además de otros residuos, por lo que se deduce que han sido utilizados para hacer botellón.

Miembros de la asociación de vecinos de Nou Llevant que han denunciado al Ayuntamiento los abandonos han visto grúas de empresas privadas que acuden de madrugada a la avenida de Mèxic y depositan allí vehículos. Uno de los residentes denunciantes cree que los propietarios de los coches han decidido desprenderse de ellos tras un accidente debido al mal estado en que han quedado, ya que no merece la pena pagar el coste de la reparación. Para no ser sancionados, algunas matrículas han sido retiradas.

Otra posible razón de dichos abandonos es que sean vehículos robados, de ahí que los usuarios no llamen a un desguace para que los retire. Durante el pasado fin de semana aparecieron dos nuevos automóviles en dicha calle, uno con un choque en la parte trasera y los cristales rotos, y otro con las ruedas pinchadas. En el primero había ayer un folleto informativo que ofertaba la compra de coches, por lo que la zona empieza a ser conocida debido al abandono de vehículos en desuso.

Desde la asociación de vecinos quieren atajar de raíz este nuevo problema en el barrio, por lo que piden al consistorio que retire los vehículos cuanto antes, ya que su creciente presencia animará a cada vez más gente a dejar coches en mal estado en la avenida de Mèxic. Uno de los que está peor se encuentra enfrente del colegio público Joan Miró, lo que puede suponer un peligro para los niños que acuden al centro.

Además de este tipo de coches, la grúa municipal deja en Nou Llevant aquellos que tienen que ser retirados temporalmente de otras calles de la ciudad porque están aparcados en alguna zona señalizada por obras, mudanza, evento, etc. No obstante, en estos casos, los propietarios sí acuden a recoger sus vehículos.