En unos días, el ficus de la plaza España perderá sus ramas y hojas. El árbol será sometido a una poda de reformación para que deje de ser un riesgo. En este año se le han caído hasta seis ramas de grandes dimensiones y ha sido necesario cercar el área más próxima.

La poda "contundente" comenzará el próximo lunes y durará unos tres días. Con ella, el ficus reducirá altura y "crecerá de manera más segura", ha explicado Rodrigo Romero, regidor de Infraestructuras del Ayuntamiento.

Este árbol fue plantado en los años 20 del pasado siglo, según ha estimado el cronista municipal basándose en archivos gráficos. Durante este siglo de existencia ha sido podado en diferentes ocasiones, la última de ellas en 1999, coincidiendo con las obras de remodelación de la plaza.

El ficus se quedará 'pelado' y su copa reducida, ya que la caída de las ramas, de entre 30 y 40 centímetros de diámetro y más de cinco metros de longitud, ha ido abriendo huecos que con la fuerza del viento han ido deformando el árbol y provocando la rotura de más ramas, según explicó ayer el técnico de la empresa Eulen, Daniel Calafell.

Los problemas con este ficus se remontan a 2015, cuando fue golpeado por maquinaria pesada durante unas obras, lo que provocó el desgarro de una de las ramas principales y la apertura de la copa a la entrada de aire. Desde ese momento, se han ido cayendo ramas. Desde el pasado mes de junio se han caído seis en diferentes momentos.

El pasado mes de julio fue necesario talar otro ficus centenario de la plaza de España, con los mismos problemas.

Olga Martínez, técnica del servicio de Parques y Jardines, explica que las ramas largas tienen la carga en la punta, que provoca su caída. Con la poda de reformación se bajará la altura del ficus y su centro de gravedad, dejando una estructura más compacta.