Vertederos de escombros en varios descampados, una lancha neumática abandonada desde ya no se sabe ni cuándo, vegetación que crece sin control donde no toca, ratas que campan a sus anchas por zonas de paso... Esto es solo parte de Nou Llevant, un barrio que, pese a la limpieza que operarios de Emaya han realizado en los últimos días, justo antes de la visita del alcalde de Palma, presenta este aspecto.
Hoy es el día en que el alcalde, Antoni Noguera, la responsable de Emaya, Neus Truyol, el concejal de distrito, Joan Ferrer y el de Infraestructuras, Rodrigo Romero, visitarán la zona. La visita está prevista para esta tarde y la cita es en la sede de la asociación vecinal Nou Llevant, aunque sus miembros no están interesados en reunirse alrededor de una mesa, quieren recorrer el barrio.
Hace tan solo unos meses que el anterior alcalde, José Hila, y Joan Ferrer se reunieron con los representantes de los vecinos. Fue en marzo y la lista de demandas era larga: ausencia de limpieza, plaga de ratas, cucarachas, suciedad acumulada en el torrente, árboles rotos, papeleras destrozadas, basura en las aceras...
Esa estampa, "o peor", es la que se mantiene hoy, medio año después, asegura Pedro Serra, miembro de la asociación Nou Llevant. Los escombros amontonados en los solares sin construir, los aparcamientos despintados, el deterioro de los pasos de peatones y la hierba en las aceras son muestra de la falta de intervención municipal en el barrio.
En los últimos días ha habido trabajadores de Emaya limpiando la zona. Serra ha comprobado cómo en los últimos días la limpieza se ha extremado, coincidiendo con la visita programada de Noguera. "Pasó lo mismo cuando vino Hila", asegura el veterano representante vecinal.
Pese a esta limpieza exprés, a simple vista, en Nou Llevant hay varios vertederos de escombros ilegales, uno de ellos situado justo detrás de unos contenedores de uso exclusivo para Emaya en la avenida México.
En esa misma arteria, en otro tramo, se acumulan desperdicios, no solo hojarasca de hace meses, sino restos de trastos abandonados. Uno de esos cúmulos ha permanecido mes y medio en un lado de la calzada, en plena vía pública y por donde pasan las barredoras. En otro punto, unos sacos de escombros han estado abandonados semanas y semanas en un aparcamiento público. Esta pasada semana fueron retirados.
Torrente desbordado
La suciedad acumulada en el torrente es otra de las quejas persistentes de los vecinos. La pasada semana se desbordó y dejó inundada la calle Barranquilla. Recursos Hídricos no quiere intervenir hasta que Emaya no quite unas tuberías que pasan por este punto y la empresa municipal todavía no ha movido ficha, explica Serra.
El representante de Nou Llevant cuestiona la impresión que se llevarán los miles de asistentes a la próxima convención de Volkswagen en el Palacio de Congresos si deciden salir a dar una vuelta por la zona.
